Una nueva tendencia, marca la comunicación de gobierno en tiempos de crisis.
En la era de la inmediatez y la sobrecarga informativa, los líderes políticos buscan nuevas formas de conectar con los ciudadanos. Una tendencia que ha cobrado relevancia en los últimos meses ha sido el uso de “cartas a la ciudadanía”. Esta herramienta, utilizada por figuras como Pedro Sánchez, Emmanuel Macron y recientemente por el presidente Joe Biden, está marcando una “nueva” manera de comunicar que tiene implicaciones directas para los ciudadanos y que se analizará su impacto en la comunicación política contemporánea.
Durante las líneas de este artículo, conoceremos las fortalezas, riesgos y el impacto en la percepción pública, de la utilización de las cartas, a través de estos tres casos emblemáticos.
Joe Biden renuncia como Presidente de los Estados Unidos
La más reciente de las cartas ciudadanas es la de Joe Biden quien optó por anunciar su renuncia mediante una carta abierta a la ciudadanía. Una carta cargada de emotividad y reflexión, que busca mostrar transparencia y responsabilidad ante una nación polarizada. La carta permitió a Biden explicar sus motivos de manera personal y directa, evitando la posible distorsión mediática.
Aunque hay quienes podrían interpretarlo como un signo de debilidad o una táctica desesperada para controlar la narrativa en este momento crítico. La unidireccionalidad de la carta impidió una retroalimentación inmediata, lo que dejó a algunos ciudadanos con preguntas sin respuesta y especulaciones sin aclarar como quién será su relevo o si el Partido Demócrata aceptará su recomendación de postular a Kamala Harris.
Pedro Sánchez y sus dos cartas
Pedro Sánchez ha recurrido a esta estrategia en dos ocasiones significativas. La primera, informó que tomaría cinco días para pensar , y la segunda, antes de las elecciones europeas. Ambas cartas surgen luego de decisiones legales en contra de su pareja.
En el caso de Sánchez, la fortaleza de esta estrategia radica en la posibilidad de conectar emocionalmente con los ciudadanos en momentos de crisis, intentando conectar desde la victimización ante los ataques recibidos a su entorno familiar. Sin embargo, sus críticos lo vieron como una medida tacticista, para intentar cambiar la atención de la agenda mediática a los problemas que afectan a su pareja.
Emmanuel Macron y la respuesta a las Elecciones Europeas
Tras las elecciones europeas, Emmanuel Macron envió una carta a los ciudadanos franceses con el fin de convocar elecciones luego de un resultado negativo en la elección y ver cómo crecía la derecha liderada por Marie LePen. Una carta que en principio pareció mostrarlo como un líder débil y derrotado aunque muchos de sus críticos lo vieron como un movimiento estratégico, la convocatoria a elecciones permitió a largo plazo frenar el crecimiento de LePen y conseguir salvar la imagen de su partido.
Haciendo un análisis del impacto del uso de la herramienta de las cartas, se puede observar que tienen efectos positivos y negativos, en primer lugar encontramos que las fortalezas de esta herramienta es que le permite al líder construir su relato en función de:
Dominar la agenda: Logran controlar lo que se discute en las agendas públicas, con el fin de tener control de ellas.
Generar cercanía y personalizar el mensaje: Las cartas permiten a los líderes transmitir un mensaje de manera íntima, creando una sensación de accesibilidad y empatía.
Controlar el mensaje: Evitan la distorsión mediática, la manipulación o la tergiversación, permitiendo a los políticos presentar sus puntos de vista sin intermediarios.
Movilizar y generar empatía: Son efectivas para generar empatía y movilizar a la base ciudadana en torno a causas o políticas específicas.
Es claro que la herramienta de las cartas, genera también aspectos negativos a tomar en cuenta:
- Percepción de desesperación o manipulación: Pueden ser vistas como actos de desesperación o intentos de manipulación emocional, especialmente en tiempos de crisis.
- Limitada interactividad: La falta de una respuesta inmediata puede frustrar a los ciudadanos que buscan un diálogo más dinámico, en el caso de la primera carta de Pedro Sánchez, generó sociego y ansiedad, siendo criticado por no dedicarle tiempo a su cargo.
- Impacto mediático y opinión pública: La interpretación y cobertura mediática pueden variar, afectando la efectividad del mensaje,
- Sensación de victimismo: Que puede afectar su imagen de cara a los electores menos informados o menos alineadas con posturas políticas. Siendo un elemento clave para el ataque de los adversarios.
Implicaciones para la Comunicación Política
Las cartas a la ciudadanía pueden reforzar la legitimidad del liderazgo y mostrar a los políticos como transparentes y responsables. Sin embargo, su efectividad depende de la autenticidad percibida, la sincronización y la capacidad de cumplir las expectativas generadas. En una época donde la confianza en los líderes políticos es tan cuestionada, el uso cuidadoso y estratégico de esta herramienta puede ser valioso.
Es clave tomar en cuenta que también representan un intento de humanizar la política y acercar a los líderes a sus ciudadanos. Cuando se utilizan con autenticidad y se acompañan de acciones concretas, pueden ser un puente efectivo hacia una comunicación más cercana y significativa. Sin embargo, si se perciben como maniobras tácticas o se utilizan para desviar la atención de problemas reales, corren el riesgo de convertirse en un boomerang que erosiona aún más la confianza ciudadana.
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